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n cierta ocasión le pregunté a mi hermano: “¿Qué es la madurez?” y me respondió en son de juego: “La madurez es la falta de inmadurez.” Entonces le respondí: “¡Qué inmaduro eres!” Con el paso del tiempo, he reflexionado en la respuesta de mi hermano y he encontrado que tiene algo de sabiduría oculta.También le dijo Dios: Yo soy el Dios omnipotente: crece y multiplícate.
Génesis 35:11
Es difícil reconocer la madurez. Es más fácil señalar la inmadurez cuando la vemos.
El identificar estas 6 actitudes de inmadurez tecnológica para superar te ayudará a hacer un esfuerzo consciente para estimular el crecimiento. Podrás poner límites claros a la inmadurez y proveer alternativas de crecimiento de camino hacia la madurez. Estas han sido extraidas de mi libro Cibermadurez: 7 pasos para que las tecnologías ministeriales den mucho fruto, disponible en Amazon.
Las alternativas de crecimiento son conductas de reemplazo deseables. En otras palabras, no te esfuerzas por dejar de ser inmaduro sino por ser maduro, y cuando creces en madurez echas fuera la inmadurez.
Temor
Puede que muchas razones para sentir temor ante la tecnología sean legítimas, pero sin la debida investigación, pueden darse como infundadas. Las razones más comunes que he escuchado al respecto son:
- La tecnología es muy cara
- Nadie sabe cómo usar la tecnología
- Nadie sabe para qué sirve esta tecnología
- Tal o cual tecnología está en contra de la Biblia
- Es difícil obtener la tecnología
- La tecnología no está disponible en mi idioma
Si sientes que no tienes las capacidades para emprender un programa de tecnología o que, si comienzas algo nuevo, la gente te va a criticar o a juzgar, déjame decirte que no estás solo. Todos hemos pasado por allí.
La tecnología es un territorio vasto, tal vez no podrás controlar cada uno de los detalles. Esto es cierto en todo inicio. No dejes que el temor te paralice e inhabilite.
Es normal sentir algo de temor al experimentar con nuevas tecnologías. Eleva tu perspectiva y actúa en amor – amor al prójimo – en el ejercicio de tu misión.
Resistencia
Algunas de las actitudes de inmadurez son pasivas. La resistencia, sin embargo, es activa. Pone trabas a las iniciativas tecnológicas y se manifiesta por medio de tácticas dilatorias y obstaculizantes, como lo son: el boicot, el ausentismo, los chismes, las amenazas, las agendas ocultas y hasta la intimidación de los líderes.
Si alguien emplea tácticas de resistencia al cambio es porque no desea crecer. Algunas de estas actitudes son fuertemente censuradas en La Biblia y pueden incluso considerarse pecaminosas. Los celos, las contiendas y las divisiones están al nivel de las orgías las herejías y las hechicerías (RVR60 Gálatas 5:19-21). Para eso necesitamos arrepentirnos.
Conviértete en una persona mansa. Ser manso significa ser enseñable. Cuando te dejas enseñar, bajas las defensas y abandonas los intereses propios en favor de la misión. En seguida consigues los recursos para financiar toda iniciativa tecnológica, aprendes la tecnología que necesitas aprender y te conectas con personas idóneas que pueden dirigir tu desarrollo.
Conformismo
El conformismo se relaciona con mantener el status quo, el cargo, la posición, o los métodos establecidos. También tiene que ver con la comodidad de la estabilidad o la tradición, porque por lo general nos gusta el cambio, pero no nos gusta cambiar.
El problema con esta postura es que el mundo alrededor no es estático y controlado, sino que está en constante transformación y si no crecemos, de todas maneras perderemos nuestra condición presente. Sin madurez, la pérdida del status quo es inevitable.
Nada más claro para poner en evidencia esta dinámica que la tecnología. Compras la computadora más avanzada del mercado y al cabo de algunos meses, los cambios en la industria y hasta las mismas actualizaciones del sistema la hacen obsoleta.
Revisa tu teología del cambio y tu filosofía ministerial. Conviértete en una persona emprendedora y traza nuevos rumbos. Desarrolla el espíritu aventurero de un explorador, que está dispuesto a probar nuevos métodos para sobrevivir y alcanzar nuevos horizontes.
Ceguera
La ceguera tiene dimensiones múltiples. No se puede ver la condición real del ministerio, o las necesidades imperantes de la comunidad, o los cambios en la cultura o la composición demográfica. Es decir, se pierde la capacidad de discernir los tiempos. También se relaciona con la falta de claridad de visión.
La ceguera puede ser total o parcial. No alcanzamos a ver la fotografía completa o apenas el siguiente paso. La ceguera de algunos ministerios en asuntos de tecnología deja clara la necesidad de tener un mapa completo, paso a paso, de desarrollo y madurez.
La ceguera se cura cuando nos vuelve la visión. La visión es el elemento fundamental de toda estrategia y en particular, de toda estrategia de tecnología. Necesitamos nuevos ojos, pero ¿cómo adquirimos nuevos ojos?
No descuentes el rol de la oración. Dios te puede dar espíritu de sabiduría e iluminar los ojos de tu corazón (Efesios 1:16-18). Un retiro, por ejemplo, de oración y meditación grupal puede ser la llave que abra la ventana de la visión. Aun así, difícilmente bajará un papiro del cielo con tu plan de tecnología. Tu visión y tu plan de tecnología serán el resultado de mucha investigación y trabajo en equipo.
También puedes importar nuevos ojos, es decir, los de una persona externa a tu ministerio que pueda hacer una evaluación neutral y darte recomendaciones puntuales. Rodéate de buenos y variados consejeros. Revisa el artículo 10 requisitos de un buen asesor de tecnología, para que aprendas a conseguir buenos asesores.
Comodidad
La comodidad lleva al estancamiento. También puede generar un apego desmedido a la tradición. Muchos siguen el dicho: “Más vale malo conocido que bueno por conocer.” Este dicho contradice un principio bíblico fundamental: Dios siempre está haciendo algo nuevo, y lo nuevo de Dios siempre es mejor.
Que la gente se apegue a la tecnología que conoce es normal, pero que el apego a lo familiar dé ocasión para ignorar lo nuevo es un factor limitante. El apego desmedido a los métodos y programas del pasado, aunque haya quedado comprobado que no ya funcionan, evidencia inmadurez. Ignorar e innovar se encuentran en los dos puntos extremos del mapa de madurez.
Lo que ahora es tradición una vez fue novedad. Corrige tu teología para que entiendas el rol de la innovación. Balancea los principios fundamentales de la fe y los métodos para compartirla. Los principios son perdurables pero los métodos pueden cambiar.
Esterilidad
La esterilidad se refiere a la incapacidad de dar frutos. Este es el caso cuando nuestros programas de tecnología no dan buenos resultados o no resultan en buenas obras. Esto sucede porque no hemos definido cuáles son esos buenos resultados o buenas obras.
La tecnología sirve para muchas cosas en muchos escenarios. Define para qué sirve la tecnología en tu situación particular. Algunas ideas serían:
- Deseas mejorar la productividad de tu equipo de trabajo
- Necesitas coordinar mejor las actividades y los calendarios
- Quieres alentar la comunicación efectiva y frecuente
- Te propones entrenar a otros en las labores del ministerio
- Te urge incrementar los donativos y quieres hacerlo en línea
La lista está limitada sólo por tu imaginación, pero en cada caso traza una línea directa entre el fruto que quieres obtener y las tecnologías que te pueden ayudar a alcanzarlo.
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